Con la presencia de los cónsules generales de Honduras y El Salvador, ayer jueves por la mañana la presidenta del DIF Municipal, Ana Beatriz González, acompañada de su esposo el alcalde José Ramón Enríquez Herrera, llevó a cabo la apertura del Albergue para Migrantes, que tendrá como objetivo primordial auxiliar a extranjeros que se desplazan hacia otras latitudes en busca de mejores condiciones de vida.
Al hacer uso de la palabra en este acto que tuvo lugar en las instalaciones del Albergue, ubicadas en las inmediaciones del fraccionamiento Acereros al norte de la ciudad, Ana Beatriz González reconoció que la migración hoy en día es un fenómeno creciente, del cual las autoridades no puede permanecer al margen.
En tal sentido, la actual administración se echó a cuestas la edificación de este inmueble que cuenta con diez módulos familiares, para brindar apoyos a extranjeros en busca del llamado sueño americano, o bien, que fallaron en su intento por llegar al vecino país del norte.
El sitio que como ya se indica, se encuentra dentro del fraccionamiento Acereros, cuenta con parámetros de seguridad y atención integral para migrantes, que incluye información relativa a su condición legal; "es un sitio digno con sensibilidad social y rostro humano".
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En su discurso, los cónsules de Honduras y El Salvador, José Natividad Ortiz y Milton Atil Chinchilla Peraza, fueron coincidentes y destacar el interés de parte de la presidente del DIF Municipal, Ana Beatriz González Carranza y el alcalde José Ramón Enríquez, señalaron que se trata de un gran esfuerzo para tender la mano a quien más lo necesita, para quienes padecen hambre y sed, y lo más importante, para quienes requieren el apoyo enorme para que sean respetados sus derechos humanos; "ustedes son líderes cuyo esfuerzo evidentemente ha sido bien encaminado en éste y otros objetivos".
Por su parte, el presidente municipal, José Ramón Enríquez fue enfático al subrayar que la iniciativa para construir el Albergue para Migrantes fue totalmente de Ana Beatriz González Carranza, ella es quien tiene el mérito, porque hoy su idea está cristalizada con este inmueble que está preparado para recibir de una manera adecuada a nuestros hermanos, en un municipio catalogado entre los más seguros del país, que se ha significado en los últimos años por ser una administración transparente y que ahora, se destaca también por contribuir en un objetivo noble de atender a hermanos migrantes que requieren del auxilio de la autoridad.
Antes, Luis Enrique Pérez Mota, delegado del Instituto Nacional de Migración en Durango, reconoció las dificultades que viven los migrantes, quienes cargan un pasado generalmente sinuoso, difícil, traumático; un presente lleno de incertidumbre y por si fuera poco un futuro incierto, de ahí que es menester destacar la labor de Ana Beatriz González y de José Ramón Enríquez con la puesta en marcha de este centro de atención.