Sera muy difícil que los ingenieros civiles y arquitectos de la entidad, puedan sostenerse con la obra privada, está ya presentan problemas económicos sobre todo en el área de la minería y forestal, declaró Manuel Galván, expresidente del Colegio de Ingenieros Civiles.
Lamentablemente la economía del país esta frenada, lejos de que los funcionarios busquen mecanismos para reactivar la economía del país, solo están pensando en la próxima sucesión presidencial, mientras tanto, algunas empresas de la construcción siguen desapareciendo y con ello el trabajo de los arquitectos e ingenieros.
Manifestó que en el caso de Durango, los arquitectos e ingenieros civiles enfrentan una crisis desde el inicio del sexenio de Aispuro Torres, el cual se recrudeció durante la pandemia y hoy la economía local no puede reactivarse a través de la obra pública porque el mandatario en turno esta cauteloso.
Expresó que cuando menos mil 500 ingenieros y arquitectos que están afiliados a los colegios y a la propia Cámara Mexicana de la Construcción, están en un momento muy crítico, no hay obra pública desde finales del año pasado, solamente se registraron obras de la Secretaria de Comunicaciones y Transportes.
Destacó que los ingenieros, pudieron percibir cómo se desplomo la economía local, ante la falta de obra pública, pues tan solo en la Caed, se ejercían antes de que entrara Aispuro Torres 800 millones de pesos, posteriormente cayó a solo 130 millones de pesos, al exmandatario le falta más gestión de recursos públicos.
El profesionista, reconoció que también el gobierno federal ha frenado la obra pública, al destinar muy poco recursos para la infraestructura de municipios y estados, por lo que hoy los ingenieros y arquitectos estamos tratando de mantenernos con la obra privada, aunque no será por mucho tiempo, ya que esta también se encuentra en declive, sobre todo en el área forestal y minero.