La Secretaría de Salud y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), son las instituciones que de acuerdo con la presidenta del Colegio de Enfermeras Durangueñas, María del Refugio Torres, tienen los sueldos más bajos para el personal de enfermería, sobre todo en quienes solo se dedican a cubrir suplencias y no cuentan con una base formal.
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Y es que en el caso de la institución federal, es frecuente un retraso en los sueldos hasta por un mes y medio; mientras que en la Secretaría de Salud, los contratos no siguen un rigor y no se dan por méritos o años laborados, sino si se tiene relación con alguno de ellos.
Aunado a ello, señaló que los sueldos para el personal de enfermería en general es raquítico, y sin aumentos considerables, ello provoca que las y los profesionistas no se sienten satisfechos con estos y pese a ello se sigue trabajando bajo condiciones de falta difíciles que conllevan un riesgo laboral, como la falta de funcionamiento de un elevador que entorpece los traslados de los pacientes al tener que llevarlos por las escaleras.
“Imagínense llevar a un paciente con una camilla, llevar el material, bajar la ropa sucia, llevar los alimentos por estas áreas, es muy difícil”, comentó María del Refugio Torres; quien aseguró que existe mucha incertidumbre entre los trabajadores con relación al IMSS Bienestar ya que si bien se les prometía como una solución a los problemas del sector salud, una vez que se firmaba el contrato, en las letras pequeñas se advertía sobre una limitante en el crecimiento laboral.
“Sí te da un sueldo al instante y te mantiene con este, con un mínimo de siete mil pesos quincenales que va aumentando hasta 12 mil dependiendo de la categoría, pero en las letras pequeñas te advierte que este sigue siendo solo un contrato y al ser uno federal, todo está estandarizado”, dijo.
En este sentido explicó que si el contrato es como enfermera general, no hay manera de que aumentes en el tabulador, lo que consideran condiciones que ponen en riesgo a la propia profesión, ya que no existe un estímulo para seguir con la preparación.
Sin manifestarse a favor o en contra, dijo que falta mayor información al respecto, pues todo lo que saben es que en los estados en donde se adhirieron al IMSS Bienestar no ha habido una mejoría en las condiciones laborales, así como tampoco se les ha garantizado la profesionalización.