El rector de la Universidad Juárez de Durango, Rubén Solís Ríos, reveló un déficit de 80 millones de pesos, todos en proveedores que obligan a medidas severas de autoridades para salir de este tropiezo, ya que no hay forma de sostener esos rubros por otro medio.

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En una entrevista con este matutino, el exdirector de la Feca, anotó que la mayoría del adeudo se asienta en pago de seguros, aunque hay también pagos pendientes de papelerías, combustibles y otros.

Añadió que él se bajará el sueldo y ya se ha hablado con los funcionarios para que lo secunden con el suyo salario, que se les retiren el uso de vehículos que representa el gasto de combustibles, de refacciones y lo correspondiente de la depreciación.

Del tal forma, se pedirá a todos los funcionarios que usen su propio vehículo.

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Igualmente, no se les dotará más de celular y las llamadas que hagan tendrán que ser por su cuenta, así sean oficiales.

Hay muchos otras medidas a tomar, con la esperanza de la gran necesidad de tomarlos con el fin de resolver el problema económico.

Afortunadamente, no hay problema de sueldos ni de aguinaldos, que se lograron solventar con el apoyo del Gobierno del Estado y en esa medida, se irán tomando providencias por ahora lo más que se pueda y que el hecho no dañe las cuestiones académicas.

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Un aspecto a revisar será el de los que cobran por horarios.

Se revisará las finanzas si son justificados esos pagos y se rescindirán a aquellos cuyos servicios no sean indispensables.