No es congruente que una persona tan ligada a la ultraderecha llegue a un proyecto cuya esencia es de izquierda, menos aún cuando la intención es la abatir la pobreza y la violencia desde su raíz, “no va a entender el proyecto, ni lo sentirá en las entrañas”, dijo la senadora Margarita Valdez al referiste a la posibilidad de que sea Manuel Espino el delegado para Durango.
La legisladora duranguense señaló que el 17 de septiembre las cinco legisladoras, sostuvieron una reunión con el coordinador de los delegados federales, Gabriel García donde además estuvieron presentes el actual delegado Edgar Morales y Manuel Espino; ahí se acordó suspender su nombramiento hasta que estas tuvieran una plática con el Presidente de la República a fin de abordar temas que urgen atender en Durango.
Pese a que se acordó esperar y no abordar el tema en la opinión pública, “yo creo que el señor Manuel Espino no cumplió ese compromiso porque al día siguiente apareció en los medios nacionales y locales manifestando que él ya había sido invitado por el presidente, dando por hecho que él se venía”, señaló.
Reconoció que hasta el momento no han sido llamadas de Palacio Nacional para abordar el asunto, pero tampoco se ha dado ningún nombramiento “actualmente Manuel Espino no es funcionario del Gobierno federal, en ninguna secretaría, en ninguna delegación, bajo ningún cargo”, por lo que enfatizó que las legisladoras nunca estarán de acuerdo en que él sea el representante.
Y es que de acuerdo con Margarita Valdez, el pasado de este personaje como militante del Partido Acción Nacional (PAN) no avala una conducta que vaya con los ideales de una Secretaría de índole social como lo es Bienestar.
“Ahora resulta que está de acuerdo con la política social del Presidente cuando fue todo lo que le estuvo reprochando en su momento con calificativos muy agresivos que le dijo a Andrés Manuel como candidato”, de ahí que no crean en sus buenas intenciones, ni en lo que dice a través de los medios de comunicación.
Y aclaró que las legisladoras en ningún momento han realizado alguna propuesta para ocupar la Secretaría del Bienestar. La propuesta de que fuera la diputada federal Patricia Ortega la encargada de dicha delegación surgió de la misma coordinación de delegados “nosotros nunca habíamos pensado en una de nosotras”, pese a ello están dispuestas a apoyar este perfil, como lo han hecho con quien actualmente está al frente de la coordinación de una forma interina.
Sin embargo, en el caso en el que el Presidente de la República, único responsable de nombrar a quien encabezará la delegación, se decida por Manuel Espino, se aceptará y acatará pues finalmente su lealtad y compromiso es incondicional para el mandatario nacional, “ojalá me equivoque, pero no será un buen elemento. Va a utilizar Bienestar como lo ha hecho siempre en los espacios en los que ha estado para sus proyectos personales”.
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