Lo que parecía una marcha tranquila por parte de la comunidad LGBT+, termino en actos violentos y vandálicos en el Congreso del Estado, recinto legislativo que se mantenía con las puertas cerradas y que con base en golpes las abrieron para manifestar su repudio.
Desde las siete de la tarde el colectivo, se reunieron en la Plaza de Armas, en donde estuvieron conviviendo de manera tranquila con toda la ciudadanía, quienes en ningún momento los agredieron, e incluso algunos se quedaron a escuchar y ver el espectáculo de los transformistas y drag queen´s.
Sin embargo, horas más tarde, tal como lo habían previsto, se dirigieron al recinto legislativo, el cual solamente era cuidado por el vigilante, lo cual no les importo y de manera violenta patearon y golpearon con palos a las grandes puertas, al grado de abrirlas y manifestar su enojo a los diputados, a quienes calificaron de homofóbicos por no legislar a favor de ese grupo.
Octavio Campagne, fue uno de los dirigentes del movimiento, quien encabezo los actos vandálicos, en donde le gritaban a los legisladores que les tenían miedo. Fue así como concluyo la décima marcha de la Diversidad Sexual Durango, con actos reprobables por la propia ciudadanía.