Lerdo, Durango (OEM).- “No hay nada comparable que el ver a nuestro prójimo que está desprotegido, sonreír y poder alimentarse”, de manera textual y con cierta nostalgia así con la voz entre cortada por recordar al fundador de este proyecto como lo fue, Marcial Aguilar, Lucía Barbanela Espinoza, explica que hay por mucho por hacer en favor de los hermanos migrantes que todos los días cruzan por la Región Lagunera.
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Con 17 años cumplidos haciendo esta labor altruista y sin fines de lucro en más de 20 comunidades rurales de la Laguna, la organización, Yhvh Jhanun Vera Jhum Dios es clemente y misericordioso, fundada por Marcial Aguilar, también brinda apoyo a personas que a su vez encabezan esfuerzos en favor de los hermanos migrantes, acuden a para llevar alimentos en ayuda a los Ángeles de Nazareno, en la comunidad de Villa de Nazareno.
Barbanela, destacó que nunca será suficiente pero que siempre será bien recibida toda la ayuda en general, pero que en esta ocasión el fenómeno migrante que durante todo el año está presente es una situación que requiere la suma de muchos esfuerzos, ya que lo más doloroso es ver a niñas y niños sufrir al lado de sus padres al no contar con suficientes alimentos o ropa adecuada para poder continuar su trayecto a bordo del ferrocarril.
Para poder abastecer y mitigar el hambre de los hermanos migrantes, la señora Lucy como se le conoce, dijo que las carnes frías les ayuda mucho para elaborar lonches o tortas.
“Se necesitan carnes frías porque se les hacen lonches, mayonesa, se les apoya con pan y tortillas y, además con bastante ropa de invierno, toallas sanitarias, pañales para los niños porque van familias completas, sopas de pastas, rollos de bolsas de dos kilos para que guarden el lonche, servilletas, papel higiénico, también se necesitan botellas vacías de plástico porque ellos las lavan y las rellenan porque cuando no se para el tren ellos pasan gritando que quieren agua”, sostuvo.
Asociación Yhvh Vera: Dios clemente y misericordioso
La Asociación Civil, Yhvh Jhanun Vera, atiende a más de 900 familias de zonas marginadas tano de la zona urbana como del área rural de Lerdo y Gómez Palacio, Durango, “tenemos un padrón más de mil 400 personas a los cuales se les da diversos servicios, en especial, para estas fechas que pasaron se les lleva juguetes, bolos, piñatas, llevamos juegos y momentos de mucha alegría”.
Con una sonrisa en su rostro, Lucía Barbalena describe que no hay más enriquecedor que ver dibujada la felicidad en los pequeños rostros de los niños, son ‘seres’ indefensos que lo único que quieren es un momento de alegría y felicidad.
Explicó además que en este centro de asistencia social todos los días brindan alimentos calientes a más de 60 personas que se acercan a la puerta con la esperanza de encontrar un bocado que llevar a sus vientres, son personas que viven en la indigencia, sin nada ni nadie quien vele por ellos.
En la finca marcada con el número 44 de la Calle Zaragoza, uno a uno van llegando las personas de escasos recursos, unos mutilados por alguna enfermedad, otros con los ojos hambrientos de recibir una bebida caliente, pero hay quienes llegan a pedir medicamentos porque no tienen absolutamente nada. Se cuenta con un dispensario donde se abastece de medicinas, aunque cada vez se carece más de un inventario completo de medicamentos como la metformina para personas con diabetes, siempre se cuenta con algo de medicinas en lo más básico.
“Tenemos un comedor comunitario, atendemos a 60 personas diarias, todos ellos son adultos mayores, personas discapacitadas, personas con debilidad mental y ancianos abandonados. Este mes en especial, es muy representativo para nosotros, porque muchas personas pasan la navidad solas en sus hogares, no tienen hogar, tienen familia pero los tienen abandonados totalmente”, explicó.
