SAN ATENOGENES Poanas Dgo. (OEM). –Con eventos culturales y exposición de fotografías, así como la asistencia de autoridades locales y federales, se festejó el aniversario número 100 de este ejido, señalando el orgullo de ser originarios del ejido de la Villita de San Atenógenes.
El festejo oficial se desarrolló en el domo del centro de la comunidad, donde el presidente municipal José Luis Valdez Valenciano, en compañía de autoridades del ayuntamiento, así como también la delegada del Registro Agrario Nacional en Durango Andrea Delgado Del Real, el presidente del comisariado ejidal Fernando Rojas Galindo, la diputada local del distrito 15, Sandra Luz Reyes, el Rector de la Universidad Tecnológica de Poanas, Francisco Javier Gracia, y Rogelio Soto Ochoa, Presidente de la Unión Ganadera Regional de Durango, fueron quienes estuvieron presentes en esta celebración.
Para dejar en la historia el momento del aniversario por los cien años de vida de este ejido, se realizó la develación de una placa conmemorativa por parte de las autoridades, se organizó la rifa de un toro semental entre los ejidatarios, mismo que fue donación del líder ganadero Rogelio Soto; Hubo una exposición fotográfica por parte de Gerardo Rivera, donde mostro fotografías antiguas de personas de la comunidad.
En los eventos culturales asistieron los alumnos de la Universidad Tecnológica de Poanas para presentar al grupo folclórico y cantantes de esta máxima casa de estudios, además se presentaron dos agrupaciones musicales por parte de la presidencia Municipal.
En el lugar también se saludó y agradeció la presencia de varios ex comisariados ejidales, quienes en el paso de los años han dejado parte de su vida al servicio del ejido, quienes evidenciaron el orgullo de pertenecer a esta comunidad y haber defendido y mantener la tierra, herencia de sus ancestros, dijeron.
El presidente del Comisariado, Fernando Rojas Galindo, hizo mención en que el ejido de San Atenógenes, es uno de ejidos más antiguos del estado, recalcando que, “como pequeños propietarios y ejidatarios, nuestros abuelos y padres y nosotros mismos, hemos transformado las tierras, en tierras aptas para el cultivo”.