CANATLÁN, DGO.(OEM).- El campo canatlense no puede parar sus actividades por la contingencia, los productores se entregan día a día a su trabajo para producir alimentos que hoy se necesitan más que nunca, para la población que enfrenta la pandemia del COVID- 19, dice la regidora Gabriela Sarahi Ontiveros Vizárraga.
Por otro lado, las áreas rurales tanto del Valle como la Zona Sierra de Canatlán se encuentran informadas sobre las medidas de prevención por el COVID-19, aquí se involucran personal de salud de las diferentes comunidades.
Sin embargo, La agricultura es el sector más vulnerable en estas regiones, como de costumbre está constantemente bajo presión a los cambios.
Por ejemplo, la actividad está siendo cuestionada y desafiada por los efectos directos e indirectos del cambio climático, como son la sequía, inundaciones, devastadores incendios forestales y la opinión pública, entre otros.
Este es el caso del coronavirus, el que está teniendo implicancias inmediatas en la agricultura y economía local e internacional de los países.
El sector agroalimentario es la base para el funcionamiento de todo el sistema económico y es la base fundamental para mitigar los efectos de la pandemia en todo el sistema alimentario, nos enfrentamos a una crisis alimentaria inminente.
Ante esta contingencia es el momento de realizar una pausa y reflexionar que si continuamos con nuestro hábito excesivos de consumo y nuestra poca educación ambiental, seguiremos alimentando a ese monstruo llamado “Crisis Ambiental”, que el día de hoy nos cobra factura y que a pesar de ello aún existen héroes sin capa como son los médicos quienes ponen en riesgo su integridad para salvar vidas, y los agricultores dedicados a las labores agroalimentarias, quienes sin descanso dedican su vida a producir alimentos y a quienes no se les reconoce su gran labor e importancia.