GÓMEZ PALACIO, Dgo. (OEM).-Las trabajadoras domesticas atraviesan una situación más que complicada, pues además de que la mayoría no cuentan con seguridad social, muchas de ellas las descansaron, aunque un porcentaje mínimo trabaja un día a la semana o hasta 3 días.
Lo anterior lo declaró Anavel Fernández Martínez, secretaria general del Sindicato de Empleadas Domesticas de la Confederación de Trabajadores Mexicanos (CTM) Durango, expuso que cuenta con 317 agremiadas, quienes son consideradas como un grupo vulnerable por la actividad que realiza y por los salarios que perciben.
Dejó en claro que por la actual contingencia sanitaria, muchas no están acudiendo a trabajar, por decisión de los patrones en descansarlas, pero otros optaron por contratarlas por uno o hasta 3 días y sólo les cubren el pago del día o los días que laboran.
Por tal motivo, señaló que esta dirigencia sindical está apoyando con despensas, las cuales solo son para paliar la situación, pues lo ideal es que vuelvan a sus trabajos, pero debemos seguir acatando las recomendaciones del sector salud para evitar más contagios del Covid-19.
Sin embargo, van acudir a otras instancias gubernamentales para solicitar ayuda, pero que esta no sea momentánea, sino permanente, para que ayude a pasar la situación por la que atraviesan.
La dirigente sindical y regidora priista del ayuntamiento comentó que además de las trabajadoras domésticas, también hay otros grupos de trabajadores afectados, tales como los llamados “franeleros”, los estibadores, boleros, a quienes también se les está ayudando.
Para finalizar, Anavel Fernández comentó que para llegar a la llamada “nueva normalidad”, es difícil saberlo, ya que incluso el mismo Gobierno federal había dicho que para finales de abril, luego a mediados de mayo, posteriormente para inicios de junio y ahora hasta nuevo aviso, pero ojalá que las condiciones de salud mejoren y se regulen las actividades, pero de lo contrario no se puede estar arriesgando a las trabajadoras y la situación seguramente se puede complicar.
