CIUDAD LERDO, Dgo. (OEM).-Hablar de la Navidad, es remontarse a la infancia. Pero no a la nuestra, sino de aquel que nació para entregar su vida por nosotros. Es remontarse al nacimiento de Jesús allá en Belén en el pesebre, cuidado por sus padres María y José recibiendo el calor proveniente del vaho de un buey y una mula.
La escena bíblica a través de nuestros tradicionales nacimientos, es mostrar lo esencial de la vida plena. Es también, tarea importante de cada uno de nosotros, más aún de quienes nos dedicamos al servicio público, dedicarnos en tiempo y espacio para ofrecer a quienes menos tienen, la oportunidad de gozar de un mejor nivel de vida.
Son tiempos difíciles, de grandes retos, que sabremos enfrentar para sobrellevar durante este trienio, la tarea de promover el crecimiento y el desarrollo de nuestro querido municipio de Lerdo.
En estas fiestas decembrinas Reciban de mi familia, mis hijos Renata y Homero, mi esposa Susy y de mi parte, un abrazo fraterno que les cubra el corazón y les alcance el alma, que perdure por siempre.
Que el Señor permita que, a pesar de las vicisitudes, puedan compartir con sus seres queridos y vivir a plenitud el verdadero significado de la Navidad. ¡Feliz Navidad para todos!, ¡y un Próspero Año 2020!