CANATLÁN, Dgo. (OEM).- El costo de energía convencional es una de las limitantes que la Integradora Regional de Productores de Manzana de Canatlán, Durango, buscará disminuir en la refrigeración de manzana, a través de las energías renovables con el uso de celdas solares.
César Gallegos Gutiérrez destaca que se busca disminuir el costo en este servicio, que representa una alternativa para el productor al momento de la comercialización de su cosecha.
Recorriendo el espacio donde se recibe la manzana y donde la preparan para llevarla al mercado, el entrevistado destacó que son varias las áreas donde se ha buscado crecer, pero el que respecta a la refrigeración también requieren los cajones pálet suficientes para llenar las cuatro recámaras y estar preparados para un año atípico, de mucha producción.
Para ello aún se requiere contar con mil 800 pálet más; cada uno tiene capacidad para 20 rejas tradicionales de 20 kilogramos, es decir, cada pálet tiene capacidad para 400 kilogramos y en total, se pretende estar preparados para recibir un volumen de 720 toneladas de manzana adicionales a la capacidad actual, aseveró.
Agregó que la comercialización es uno de los puntos estratégicos donde debe enfatizarse, de ahí el interés para explorar las centrales de abasto para una bodega en las que se consideren estratégicas, algo que en su momento ya se informó a la asamblea, aunado a la remodelación de la maquina empacadora, para que la fruta llegue con mejor presentación y a un menor costo al mercado.
También recordó que más allá de las situaciones adversas, se ha venido creciendo, como lo muestra la construcción de una nave industrial de mil 500 metros cuadrados, que cuenta con oficinas, rampa de carga y descarga, en funcionamiento desde el mes de agosto del año pasado, para lo cual se contó con la intermediación de la alcaldesa Dora González Tremillo y el apoyo del gobernador José Rosas Aispuro Torres, a quienes se les agradece y reconoce el respaldo.
La fruticultura es un área productiva que lejos de lo que se piensa, está en un momento decisivo para crecer, adoptando nuevas tecnologías acordes a una realidad más difícil, diferente, por el llamado cambio climático, donde deberá ser aún más eficiente el uso del agua y también el sistema de comercialización, para que la fruticultura siga siendo no solo emblema de Canatlán, sino parte del sostén de muchas familias y de la economía en la región, concluyó.