CANATLÁN, Dgo. (OEM).- El cultivo del manzano en la región frutícola de Canatlán pudiera estar en una etapa de transición, entre las plantaciones tradicionales y las de alta densidad, en tiempo en que disminuye la superficie dedicada a la producción de la pomácea.
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Así lo menciona Manuel Meraz Villaseñor, ingeniero frutícola con amplia experiencia en campo y también en la función pública, lo mismo a nivel municipal que estatal y federal, quien menciona que a la fecha pudieran existir aproximadamente 2 mil hectáreas de manzana en producción, cifra extraoficial muy distante a las 3 mil 800 que dijo hace cinco años, se tenían en la región manzanera.
Atrás quedó la imagen de la entrada a Canatlán, tramo poblado Santa Lucía a la cabecera municipal, rodeada de huertas de manzano y son cada vez más los espacios desmontados y dedicados a la producción de granos, forrajes e inclusive a la ganadería.
"Todo en la vida es de ciclos, y en el caso del cultivo manzanero tradicional, de aquel que tenía plantaciones con población de 180 a 220 árboles por hectárea ya está desapareciendo, para transformarse en huertas de alta densidad, con poblaciones entre los 800 y los 2 mil 500", dijo Meraz Villaseñor.
“Nos faltó hacer un traslape generacional para empezar a meter árboles semienanos, nos faltó reforzar de manera gradual , en gran parte debido a la falta del recurso económico de los pequeños productores, a diferencia de aquellos Fruticultor que teniendo el medio lograron plantar árboles semienanos y enanos”, manifestó.
Egresado de la Universidad Autónoma de Chihuahua, el profesionista canatlense hace ver que se debe privilegiar a variedades que puedan competir en el mercado, como la Canatlán, JRC, Starking 400, Top Red y Gala, que salen al mercado un mes antes que la manzana de Chihuahua.
Después de ese periodo de tiempo, se complica el panorama para la manzana local por la dificultad de competir contra la pomácea del vecino estado, dándose el caso de comerciantes que inclusive traen fruta de Chihuahua a refrigerar aquí a la región, destaca Meraz.
Un ejemplo de lo anterior se presentó en el ciclo frutícola 2022, cuando hubo mayor producción de manzana roja en Chihuahua, provocando que en la región de Canatlán a la fecha haya un alto porcentaje de fruta en refrigeración, sin ser comercializada, puntualizó.