LA SAUCEDA, Canatlán, Dgo. (OEM). - El poblado La Sauceda no solo debe tener su calidad de Santuario, sino que debe de operar como tal, con los espacios que permitan a los visitantes acudir a venerar a la imagen del Divino Pastor, que es el centro de interés de los peregrinos.
Entrevistado mientras se desata aguacero la tarde noche de domingo, el jefe de cuartel Gerardo Quezada Morales destaca que la presencia de visitantes en esta localidad, ubicada a dos Kilómetros de la cabecera municipal de la cual prácticamente es zona conurbada, se debe a la presencia de la imagen del Divino Pastor, misma que se encuentra en la antigua capilla del lugar.
Recordó que, a partir de la restauración de la imagen, iniciada a partir del mes de abril del año 2015 en la ciudad de Guadalajara, en el taller Misión Arte A.C, para regresar el mes de mayo del año siguiente a la comunidad, siendo recibida por una gran fiesta, que tuvo la asistencia de más de 500 personas, en ceremonia religiosa presidida por el Obispo Emérito Juan de Dios Caballero y el párroco José Martín Favela Rodríguez.
Con la calidad de Santuario que se tiene, la capilla debe estar abierta de manera permanente para recibir la visita de peregrinos y fieles que acuden a pagar mandas y agradecer a Dios por favores recibidos, lo cual no lo permite el hecho de que las puertas están cerradas y se abren solo cuando se acude a darle aviso a la persona que tiene la llave.
El Arzobispado debiera prestar más atención a esta situación y darle a La Sauceda la atención que tiene por su calidad de Santuario, título o nombramiento que se hace al templo en el que se venera una imagen, dioses o reliquia de especial devoción, como es el caso de la capilla de La Sauceda.
Simplemente este domingo (1 de agosto) llegaron por separado tres familias a visitar y venerar la imagen, sin que pudieran hacerlo al encontrar cerradas las puertas, creando una imagen que no beneficia a La Sauceda ni tampoco a quienes hacen su viaje en vano.
Cinco veces jefe de cuartel, incluyendo al período actual, nativo del lugar y nieto de don Tomas Morales Contreras, último administrador de la Hacienda La Sauceda, a la cual pertenecía la capilla y la imagen, Quezada Morales menciona que es respetuoso de las formas y maneras en que trabaja el comité encargado del templo, pero lo cierto es que la autoridad religiosa encargada de velar por el buen desarrollo de los santuarios debiera intervenir para generar mejores condiciones al peregrino o turista religioso.
La Sauceda debe recibir los cuidados y atenciones que su importancia merece, lo que se observa cada primer viernes de marzo y también la capilla debiera estar con los cuidados necesarios para evitar daños, como se observa en este tiempo de lluvias, con una canal que al desaguar humedece la pared del frente de la capilla, como se observa a simple vista, puntualizó.