NUEVO IDEAL, Dgo. (OEM).- Pocas localidades viven con tanta intensidad la Semana Santa como la cabecera municipal y la comunidad de Tejamen, que este año realizaron los actos con los que celebran este tiempo de pasión.
- Te puede interesar: Viacrucis en Gómez Palacio demuestran la fe de católicos
Entre las muchas actividades que se llevan a cabo, destaca la representación del Vía Crucis viviente, en el que participan decenas de personas, y que concita cada año la atención de toda la comunidad católica en las catorce estaciones de la muerte de Cristo, que se representan al medio día del Viernes Santo.
En la comunidad de Tejamen el tesón con el que los vecinos han mantenido viva la tradición de representar todos los años el Vía Crucis, que no sólo es un acto de fe, sino una actividad cultural que une al pueblo que ayuda a potenciar las tradiciones del municipio que en esta ocasión involucra a todo un pueblo y demuestra que la Semana Santa no son solo procesiones pues a decir de los pobladores esta tradición data desde el año de 1932.
En la cabecera municipal, el recorrido que se hizo por las calles del centro de la ciudad es seguido por miles de Neoidealenses y turistas que acompañan para participar de las oraciones que plantean cada una de las estaciones llegando hasta el templo de Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús donde atestiguan la puesta de la resurrección.
Mientras que en la comunidad de Tejamen dando seguimiento a la tradición judía dentro de las catorce estaciones suben al cerro negro donde tiene lugar las Crucifixión para posteriormente bajar a Jesucristo ya muerto trasladándolo al templo de la Virgen de Guadalupe donde los presentes atestiguan la Resurrección de Cristo.
Semana Santa en Tejamen, es ese tiempo en que la fe de miles de personas acompaña el último camino que recorrió Jesús de Nazaret hacia su calvario recordado con uno de los actos más especiales y emotivos de la Semana Santa: el Vía Crucis viviente, en el que se involucran la mayoría de los habitantes de la localidad.
Por la tarde, creyentes católicos de la comunidad de Tejamen y la propia cabecera municipal asistieron a los templos nuevamente para escuchar las siete palabras y posterior a esto participaron en la marcha del silencio y rosario del pésame
Con estas escenificaciones señalan sus integrantes que se busca mantener la tradición del Vía Crucis Viviente, ya que aseguraran, la gente aprende más viendo y sintiendo el sufrimiento que tuvo Jesucristo hace más de dos mil años.