CANATLÁN, Dgo. (OEM).- La Escuela Normal Rural J. Guadalupe Aguilera vive una situación difícil debido a la tercera ola de calor, que por su condición de internado tiene aspectos que la hacen más difícil soportar, en dormitorios a los cuales por su estructura les falta mayor ventilación.
Entrevistada al respecto, la directora Alma Guadalupe Salazar Castañeda responde que sin duda se vive una situación complicada, no solo en la escuela sino en todo el municipio, estado y gran parte del país, con altos grados de temperatura, manifestó.
“Aquí nos trata mal; los dormitorios podemos decir que son foco rojo, porque se convive en cada uno de los edificios que están alrededor de 100 jóvenes, todos juntos divididos en cubículos de cuatro”, señaló.
Asimismo, agregó que existen riesgos de deshidratación, de enfermedades de tipo gastrointestinal, porque de todos modos en ocasiones se lleva alimento a los dormitorios y se descompone, asevera.
Por otro lado, también mencionó que en las aulas, algunas han sido beneficiadas con aire acondicionado, los cuales están encendidos pero en otras no y tanto alumnos como maestros están solicitando que se les apoye aunque sea con un ventilador, destaca.
Algunos maestros decidieron dar sus clases en espacios más amplios, como en la cancha techada o al mismo auditorio y así tener un poco más de circulación de aire.
Actualmente está la totalidad de la matrícula, los 408 alumnos están en el plantel, a partir del lunes pasado y todos cerrando semestre, respondió Salazar Castañeda.
Respecto a cuántos dormitorios existen, responde que en los cuatro edificios hay dormitorios, se tiene una nueva área que se construyó recientemente, así como el dormitorio del consejo estudiantil y además de dos espacios que han sido habilitados en el edificio central, detalla.
La parte interna del edificio central tiene solo ventana al exterior, sin embargo muchas de esas ventanas se encuentran selladas, por su antigüedad y el material se encuentran selladas, no es viable poderlas abrir ni tampoco cambiarlas por motivo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH)
Sin duda se complica la situación por la onda de calor; se han tomado medidas para contar con agua suficiente y se hidraten los alumnos; se ha buscado apoyar con ventiladores, se adquirieron seis en la última semana y es la manera en que se puede beneficiar un poco, destacó.
Estamos convencidos de que se dice siempre nunca se habían tenido estos calores, pero ahora fue una realidad, aseveró.
Se monitorea de manera constante el tema de la salud; hemos tenido alumnos y personal que se les baja la presión; personas que presentan dolor de cabeza y cansancio, no se ha tenido alguno caso de alguna enfermedad gastrointestinal, terminó diciendo.