Es necesario que el gobierno local y particularmente las áreas a las que les compete esta tipo de problemáticas, por fin volteen a ver este fenómeno y ayude con recursos para enfrentarla, porque de otra manera difícilmente la sociedad civil, a pesar de los esfuerzos que se hacen desde esta perspectiva, contará con las capacidades financieras y profesionales para atacar con solvencia la creciente práctica del suicidio, declaró en entrevista el presidente del Consejo Cívico Ciudadano, Sotero Soto.
En torno al asunto, de entrada, el empresario de la construcción reconoció y lamentó que en efecto, el número de suicidios está en constante crecimiento en nuestro estado.
A pregunta expresa sobre la influencia de la pandemia en este tipo de condiciones, señaló que se pensó que en algún momento, la necesidad de permanecer en casa generada por la contingencia sanitaria, se traduciría en armonía, en diálogo y en bienestar en las familias.
Sin embargo, transcurrido más de un año de que inicio la crisis en salud, las estadísticas marcan una realidad diferente, con mayor violencia intrafamiliar, más consumo de drogas y lamentablemente también, más suicidios.
En el papel que nosotros hacemos como ciudadanos organizados, observamos que en efecto, las cuestiones de violencia, que incluyen el bullyng cibernético por citar un ejemplo, avanzan.
Como Consejo Cívico Ciudadano hemos seguido trabajando, primero de manera virtual, pero ahora ya retomando de manera presencial. Estuvimos en Tamazula, atendiendo a jóvenes y padres de familia. Desafortunadamente dimos cuenta de que drogadicción, alcoholismo y violencia entre jóvenes, también en esta zona de la entidad es severo.
Son condiciones, dijo, que muchas de las veces desembocan en determinaciones, como lo estamos viendo, de personas que se quitan la vida.
Y es que no tenemos el apalancamiento gubernamental para abatir este fenómeno; “sucede que las dependencias a las que les corresponde trabajar para prevenir el suicidio, no cuentan con los recursos necesarios para enfrentar una situación de este tipo que es muy grave, dado que se trata de la muerte de personas”.
Mencionó que desde la sociedad civil se hacen algunos esfuerzos, como el caso del Consejo Cívico Ciudadano, para abonarle a la prevención del suicidio, sin embargo, no se cuenta con los recursos suficientes para que la labor sea contundente, de ahí la necesidad de que los gobiernos finalmente volteen a ver lo que está ocurriendo y, lo más importante, que destinen recursos económicos; “difícilmente la comunidad, a pesar de estar organizada, contará con la capacidad para alcanzar el objetivo de prevención”.