Jesús Alejandro García Alvarado es un nombre que en las últimas horas ha cobrado popularidad en las redes sociales, pues se trata de un niño, de apenas ocho años de edad, que murió a causa de una enfermedad, pero que alcanzó a cumplir su sueño de ser policía.
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La corporación de seguridad en el municipio de Gómez Palacio, Durango, lo nombró policía, realizando así su gran sueño, y generando una mueca de felicidad en el menor. Pero la historia se convirtió en conmoción cuando enseguida se reportó su muerte.
El menor no se quedó con las ganas de ser un agente, pero es lamentablemente que su muerte haya sido a tan corta edad. Como todo policía fue despedido de manera especial, con guardias de honor. Según se reveló, fue el domingo que se informó sobre su muerte, por lo que fue despedido como los grandes.
Para despedirlo se llevó a cabo el cortejo fúnebre desde la casa donde vivía el menor, con una parada en las instalaciones de Seguridad Pública de Gómez Palacio, y para finalizar el recorrido hasta el Panteón Municipal del fraccionamiento Morelos II, donde fue sepultado y despedido por familiares y seres queridos.
"Fue un honor haber tenido a Jesús Alejandro como agente, ya que en su día fue nombrado el mejor agente de la corporación, por lo que fue premiado con un reconocimiento que resaltaba su importante labor como elemento”, fueron las palabras de uno de los agentes.
