El consumo de drogas en Durango está dañando al tejido social e incluso ya afecta a los más débiles, dado que se registran nacimientos de bebés con síndrome de abstinencia porque las madres son adictas, según refiere la presidenta de DIF Estatal y anunció que se establecerá una clínica ambulatoria para apoyar a menores consumidores.
Al referir lo anterior, Elvira Barrantes de Aispuro explicó que en Durango están naciendo bebés con síndrome de abstinencia debido a que muchas madres jóvenes son adictas y lo grave es que se embarazan, dan a luz y siguen drogándose; de ahí que este fenómeno sea cada vez más recurrente.
Lamentablemente el consumo de drogas está causando una fuerte adicción en Durango y con ello se va deteriorando el tejido social, a grado tal que ha hecho daño en sectores tan vulnerables como la niñez.
Anunció la presidenta del organismo asistencial que próximamente se instalará en el edificio de DIF una clínica ambulatoria, misma que será operada por Oceánica. Allí se atenderán casos ya detectados de jóvenes entre 12 y 18 años que son consumidores y lamentablemente hay muchos.
Reconoció Barrantes de Aispuro que esta es una gran oportunidad para rehabilitar y apoyar a tantos adolescentes que se drogan, especialmente porque se les abrirá un espacio de atención para ayudarles en este grave problema que se vive Durango.
Asimismo puntualizó que este apoyo muy necesario en estos momentos, servirá de mucho porque en estas edades, aunque ya tienen relación con las drogas, aún se puede salvar a estos jovencitos con una atención especializada.
Lamentó que el consumo de drogas es un cáncer que está en todo el estado, aunque hay zonas como Pueblo Nuevo donde muchos menores se drogan.
Este gran problema social debe atacarse desde el hogar, que es donde surge, puntualizó la presidenta del organismo asistencial.