El estado de Durango cuenta con dos pueblos mágicos, se trata de los municipios de Mapimí y Nombre de Dios, éste último ubicado a un aproximado de 40 minutos, viajando desde el Centro Histórico de la capital, tomando la carretera a México. El cual es conocido por su mezcal, dulces, conservas, sus gorditas, sus parajes, su gente, y sus pintorescas calles.
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En Nombre de Dios, el pueblo más antiguo del estado, a su vez se encuentra La Constancia, a la cual se puede llegar a pocos kilómetros en dirección sur. Esta localidad es considerada como la que tiene la mayor población dentro del municipio.
La Constancia, con varios cuerpos de agua, y abundante vegetación, hace años, fue también parte de la gama de escenarios que ofreció Durango para el séptimo arte; ahí se grabaron películas que situaban en el viejo oeste.
Uno de los parajes en este lugar es Las Compuertas, por donde cruza también el río que se alimenta de Los Berros. A donde acuden muchos a pasar un rato agradable en familia, es un espacio con asadores para el disfrute de duranguenses y turistas.
Mucha gente acostumbra llegar a este lugar sobre todo los domingos; es justo el fin de semana que se observa más gente en este paraje, y el denominado Paseo Colón, un pasillo que lleva hasta la alberca, en el centro de La Constancia.