Urgente que las autoridades de salud y de seguridad deben de retirar de las calles a las personas con problemas de salud mental y adicciones ya que está provocando problemas a los comerciantes y a la propia ciudadanía que acude con las familias, declaró la presidenta de la Cámara de Comercio en Pequeño (Canacope) Beatriz Zamora Nájera.
Destacó que el problema de personas con problemas de salud mental y con problemas de adicciones se ha incrementado de manera considerable, ya que anteriormente solo se veía una que otra persona en la zona centro, pero ahora es muy frente verlos deambular por el primer cuadro de la ciudad.
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Estas personas en su mayoría no son violentas, solo unas cuantas de repente se tornan agresivos con el personal de las tiendas o con la gente que sale a comprar, sin embargo, dan una mala imagen para el turismo y de cualquier manera no dejan de ser un riesgo para la población.
Manifestó que comerciantes adheridos a la organización que coordina, han registrado casos de adictos que se meten a las tiendas y arrebatan las mercancías o salen corriendo con ellas, asustando a los clientes y a las trabajadoras otros solo se meten a escandalizar.
Hace falta que de manera conjunta autoridades de salud, de seguridad pública y de los propios empresarios, ayudar a esa gente que está en las calles con problemas de adicciones o enfermos mentales, ellos sí pueden recuperarse sin embargo, requieren de tratamientos prolongados, expresó la presidente de la Cámara de Comercio en Pequeño.
Con respecto a la inseguridad, la líder de los comerciantes formales, reconoció el trabajo de las autoridades de seguridad pública municipal, ya que han atendido el problema que en días pasados se les presento, al registrarse algunos robos.
Dijo que ellos como comerciantes organizados, han conformado un grupo con el cual se cuidan mutuamente, y al momento de que se presenta cualquier ilícito, se comunican entre ellos y con la propia dirección de seguridad y esto ha dado muy buenos resultados, sin embargo, sigue pendiente el tema de los adictos que están en las calles y de las personas con problemas de salud mental que están abandonados por sus familiares y no se sabe a dónde pertenecen.
Antes de finalizar, preciso que en el caso de las extorciones telefónicas, estas han disminuido considerablemente, pues al momento de recibir llamadas sospechosas o de personas tratando de pedirles dineros, de inmediato son bloqueados y se informa al grupo de comerciantes para que no contesten las llamadas.
