Propietarios de tortillerías, le apuestan más a que la gente vaya directamente a sus locales para comprar las tortillas, donde ofrecen, calidad, precio e higiene, porque aunque no están en contra del reparto en las tiendas, lejos de generarles más venta, los intermediarios se quedan con un 30% de ganancia, así lo detalló Antonio de la Torre Carlos, presidente de la Unión Nacional de Industriales de la Masa y la Tortilla.
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“No es malo el reparto, pero el problema es que si yo tengo el kilo en 20 pesos, tengo que darla en 16 a las tiendas, y ellos la dan hasta 22 pesos al consumidor, entonces ganan más como intermediarios”, y agregó “somos la industria a nivel mundial que damos más barato fuera de las fabricas”.
Apuntó que el kilo de tortilla siempre va a ser más caro si se compra en una tienda, con ganancias de hasta 4 pesos por kilo para el tendero, pero aparte de eso tiene que ser a consignación, “entonces si las tortillas se quedan, pues al tendero no le interesa, y hay que retirarlas porque no se vendieron, y es un desperdicio”.
Otra situación que se presenta, es que a veces el producto que está vendiendo en las misceláneas, no lleva ninguna información de donde vienen esas tortillas, pueden ser productos elaborados por comercios informales, donde no siempre cuidan el proceso de preparación e higiene, además como todo comercio informal, afecta las ventas de quienes están establecidos.
Se ha detectado también situaciones de que se cobra el kilo, pero no es un kilo, es menor cantidad unos 800 gramos, mientras que en las tortillerías se va pesando frente a cada persona lo que pide.
Comentó que al ser aplicada la norma oficial 187, se pudiera dar certidumbre a los consumidores, de saber siempre de donde son las tortillas que compra, y no se trata de pretender prohibir el reparto, pero sí que se haga de manera formal en beneficio de los consumidores.
