La propuesta de reforma constitucional en materia eléctrica afecta la libre competencia, daña a empresas, a los empleos y pega en los bolsillos de las familias, así lo sostuvo la COPARMEX, tras de pedir al gobierno federal proteger la libre competencia que beneficie al consumidor final en precio y servicio. Además es necesario recuperar el crecimiento para que las empresas crezcan y generen más y mejores empleos.
Lo anterior fue dado a conocer Oscar Moreno, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), quien destacó el rechazo a dicha iniciativa por ser contraria al bienestar de los consumidores de electricidad y al limitar la competitividad, misma que es esencial para el desarrollo social y económico del país.
Coincidimos en la importancia de continuar fortaleciendo a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en beneficio del pueblo de México, aunque estamos convencidos de que la mejor forma de consolidar al sector energético en México es a través de la creciente colaboración entre los diferentes actores, sean públicos o privados, mediante una participación integral y no excluyente, dijo.
La inversión que el sector privado aporta al sector energético es y será determinante para abastecer de energía a los hogares mexicanos y a los negocios que activan la economía de este país, y que a su vez incentiva el desarrollo social. La aprobación de la Reforma Constitucional desincentivará las inversiones de privados que realizaron sus modelos de negocios bajo el amparo de la Ley de Servicio Público de Energía Eléctrica (LSPEE) y la Ley de la Industria Eléctrica (LIE).
Manifestó que el sector eléctrico no debe ser visto como un fin en sí mismo, sino como un medio proveedor de un insumo básico para alcanzar el bienestar de los mexicanos. “Para que las familias paguen menos por sus gasolinas, gas y, en este caso, electricidad, es necesario que haya más competidores y mayor oferta”.
Afirmo que la iniciativa cierra la puerta a la competencia y es un hecho que de aprobarse, en el corto plazo, generará desabasto, apagones y tarifas cada vez más caras para las familias mexicanas.
Por otra parte, la desaparición de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), y la reincorporación del Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) a la CFE tendrá como resultado la eliminación de la competencia, aumentará las ineficiencias en el Mercado Eléctrico, ya que la CRE tiene la función crítica de establecer reglas claras y promover la certeza legal y regulatoria en el mercado energético como un ente autónomo desligado de los ciclos políticos.