Con una deuda superior a los 240 millones de pesos, recibió el actual alcalde de Pueblo Nuevo, Adrián Chaparro Gándara, la administración municipal en el año 2019; cinco años después, ésta logró una reducción del 50 por ciento, pues además de hacer los pagos correspondientes a una cantidad importante de estas, algunas más ya habían expirado y pese a ello todavía aparecían en los estados financieros.
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Dicha reducción está relacionada también al pago de laudos perdidos por administraciones pasadas y que de 191 expedientes ya se cuenta con solo 28 casos que siguen vigentes y cuya deuda asciende a más de 51 millones de pesos, entre mercantiles y laborales.
Explicó que corresponden a pagos grandes superiores a los 16 millones de pesos, debido a que se trata de liquidaciones de un exsecretario del Ayuntamiento y un tesorero, a quienes se les debe pagar más de ocho millones a cada uno. Además de empresas a las que el Gobierno municipal no les pagó en su momento y los montos han estado subiendo.
“En estos años hemos pagado más de 17 millones de pesos en esos que hemos resueltos. Los que restan son expedientes muy grandes y no hemos logrado pagarles, hemos estado abonando y combatiendo estos problemas”, dijo.
Informó que se trata de endeudamientos que se vienen arrastrando desde el año 2010 y 2014, “los años más complicados en estos asuntos”, dijo Chaparro Gándara, quien aseguró que durante su administración no se ha incrementado esta deuda y por el contrario le permitió al municipio cambiar de semáforo rojo, al verde, lo que mejora su calificación financiera y los hace susceptibles de solicitar créditos.
Del 2019 a la fecha se ha saldado con el pago de algunos impuestos y actualmente se tiene disciplina financiera para el pago de lo que les corresponde para evitar el aumento de esta deuda y por el contrario tratar de saldarla.
De ahí que si bien se corre el riesgo de dejar de invertir en ciertos rubros, para atender el pago de deuda, el alcalde de Pueblo Nuevo, advirtió que se ha buscado hacer un presupuesto en el que se racionen gastos como el de combustible.
“El municipio sigue operando de manera normal, logrando cubrir esa parte de los servicios públicos, la seguridad y todo lo que se gasta en el municipio, todavía podemos ahorrar un poco y eso es lo que nos ayuda a abonar y poder pagar situaciones que se vienen arrastrando”, dijo. Todo ello con base en un presupuesto mensual que les permite determinar cuánto es el recurso que se tiene disponible.