Resintió Durango #UnDíaSinNosotras

Algunos comercios y bancos prefirieron cerrar sus puertas: desiertas, muchas calles y avenidas

Jesús Ismael Hernández | El Sol de Durango

  · martes 10 de marzo de 2020

Foto: León Carmelo Alvarado | El Sol de Durango

Ayer la ciudad de Durango tuvo un despertar diferente. Por la mañana algunas calles y avenidas estaban casi desiertas y todo se movía a otro ritmo… Prácticamente no había mujeres en la calle.

Fue muy notable la falta de mujeres en las actividades cotidianas de la ciudad. Desde muy temprano se comenzó a notar en el transporte público, en las escuelas donde se estimaba un ausentismo escolar de hasta del 95 por ciento. Algunos comercios y bancos prefirieron cerrar sus puertas.

El paro de mujeres convocado bajo el lema #UnDíaSinNosotras, se resintió en prácticamente toda actividad laboral y comercial en la capital duranguense.

El centro de la ciudad lució notablemente solitario, algunos comercios cerrados y los que estaban abiertos parcialmente vacíos, mientras en el transporte público solo transportaba a sus destinos a unos cuantos.

En los supermercados más grandes, se debe resaltar que estuvieron abiertos y atendidos mayoritariamente por hombres, en las cajas y en los diferentes departamentos, aunque sí hubo presencia de algunas mujeres laborando, fueron las menos.

“En esta tienda queremos que toda mujer se sienta segura y sea respetada.

“Hoy faltamos al trabajo para que mañana no falte Ni Una Más…

“Esperamos que la ausencia de todas las mujeres te concientice también a ti”, se leyó en un cartel afuera de un establecimiento comercial.

En restaurantes de la localidad no hubo como de costumbre cajeras, meseras, cocineras, solamente personal masculino atendiendo a unos cuantos comensales.

La convocatoria realizada para este 9 de marzo tuvo eco en la ciudad de Durango, porque fue muy notaria la falta de mujeres caminando en las calles, en las plazas y fue evidente su ausencia en comercios y otras actividades.

La gran mayoría de las instituciones bancarias cerró sus puertas, dejando únicamente en servicio los cajeros automáticos. En las pocas sucursales bancarias que abrieron sus puertas se observó la atención solamente de personal masculino.

De más de tres mil mujeres trabajadoras del Gobierno del Estado, se presumía la labor de no más de 180, mientras en el gobierno municipal, de aproximadamente dos mil trabajadoras, asistieron muy pocas. En el sector salud se informó que con anticipación que las unidades médicas y hospitales estarían trabajando de manera normal.