El pasado miércoles 31 de julio se realizó la tercera dispersión de los recursos correspondientes a 10 millones de pesos que sirven como apoyo a siete mil mujeres inscritas en el programa de la Tarjeta Madre, informó el titular de la Secretaría de Bienestar Social del Estado de Durango (Sebised), David Payán Guerrero, quien aseguró que la meta es continuar para que las condiciones del programa mejoren ya que se busca llegar a 157 mil hogares en los que una mujer es la responsable de la familia.
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Próximamente se dará inicio a otra de las vertientes de la tarjeta, misma que está relacionada con la alimentación, ya que la intención es que no solo se cubra una necesidad económica, sino que a través de otros beneficios abarcar un esquema mucho más amplio para lograr incidir en los indicadores de pobreza.
Son mil 400 pesos que se entregan de manera bimestral, sin embargo la institución ya trabaja para comenzar a operar las otras vertientes del programa, “la tarjeta es un programa que ha estado en una fase de evolución, y eventualmente incrementando”, comentó Payán Guerrero, quien aseguró que las próximas a entregar son la tarjeta gris donde se darán apoyos alimentarios, y la verde con descuentos y servicios.
Aunque se esperaba que a finales del mes de julio comenzaría la operación de la segunda etapa del programa Tarjeta Madre, en la que se pretende amentar el número de beneficiarias entre 50 y 60 mil mujeres, esto no se ha sido posible. Pese a ello no se descarta la posibilidad de poder ampliar las tarjetas con apoyos económicos.
El titular del área de Bienestar Social del Gobierno del Estado, refirió que el presupuesto con el que se cuenta nunca será suficiente para atender todas las carencias que tiene la sociedad de manera total e integral, por lo que deben ser eficientes al momento de ejercer el recurso que se tiene y aplicarlo en donde se necesita para acercar los servicios a las familias.
De esta manera se podrá incidir de manera positiva en la disminución de los indicadores de pobreza alimentaria, salud, educación, vivienda y seguridad social, “la prioridad ahorita es el tema de la vivienda, que haya servicios básicos, viviendas de calidad, espacios dignos, infraestructura educativa, acceso a la alimentación”.
De ahí que para el 2025 se tiene pensado hacer una planeación del presupuesto asignado en el Ramo 33, enfocados en la infraestructura de salud, un indicador de pobreza que Durango comparte con el resto de los estados.