Sigo siendo alcalde de Durango: Enríquez

El alcalde del municipio de Durango salió en respuesta a la sanción emitida por el Congreso del Estado

Por: Víctor Blanco

  · martes 11 de diciembre de 2018

José Ramón Enríquez Herrera, es respaldado por directores del Ayuntamiento de Durango / Imagen: Lulú Murillo

Después de una confusa sesión del Congreso del Estado, lo primero que quiero decirles a los ciudadanos es que un servidor, sigue siendo presidente municipal de Durango.


Así las primeras palabras del alcalde José Ramón Enríquez, en conferencia de prensa, luego de conocer la aprobación por mayoría emitida por el Congreso del Estado para su inhabilitación como alcalde capitalino.

Tras provocar la ovación de los presentes al expresar lo anterior, Enríquez Herrera reforzó: “Seguiré al frente del Ayuntamiento, cumpliendo la responsabilidad que el pueblo de Durango me concedió en las urnas el pasado 5 de junio de 2016”.

Fue el patio de arcos del inmueble que por años albergó la sede central del Ayuntamiento de la capital, hoy Museo de la Ciudad, el sitio donde se llevó a cabo este encuentro del munícipe con medios de comunicación.

Qué fácil lastimar a la autonomía municipal; los duranguenses siempre hemos tenido muchas luchas y hoy seguiremos luchando por que haya autonomía municipal, pero sobre todo, porque haya resultados como gobierno

Seguiré, continuó, al servicio de los duranguenses, redoblaré el esfuerzo en el cumplimiento de esta extraordinaria responsabilidad de servir a las familias de Durango.

Agregó además que en el Congreso del Estado, en una sesión sumida en la opacidad y en la confusión, está instrumentando una acción política en el interés de confrontar a Durango.

Aquí, el presidente se refirió a los cinco diputados que no emitieron voto para su inhabilitación. Les agradeció el no involucrarse en intereses oscuros.

Señaló que a nadie se le puede privar en este país de sus derechos civiles y políticos: “Hoy los integrantes del Congreso del Estado han hecho de este Poder Legislativo el instrumento para degollar, aniquilar y despojarme de mis derechos civiles, políticos y humanos”.

Acompañado de todo su gabinete y de su esposa, la doctora Ana Beatriz González, añadió que la pretensión de aniquilar no es solamente en su contra, sino en general, en contra del pueblo de Durango: “Por eso, desde aquí les digo: no lo vamos a permitir, a la mala no, queremos juego limpio en Durango y han calculado tres años y medio”.

Your browser does not support HTML5 video

José Ramón Enríquez reflexionó que cualquiera sin tener el mínimo conocimiento de un programa de elecciones, diría es 2019 y 2022 para la elección estatal, la proyección de esta inhabilitación.

A la vez, estableció preciso que está puesto y dispuesto a comparecer ante cualquier institución, siempre y cuando se actúe en el marco de la ley: “Con apego a Derecho, y exigiendo el respeto al Debido Proceso”.

Consideró que “es inadmisible que un Congreso se haya prestado para hacer un simulacro que lejos de fomentar la unidad y el respeto a los derechos de todos sus representados, intente a la mala y en forma desproporcionada despojarme de mis derechos civiles y políticos, atropellando no sólo a la autonomía municipal, sino mis derechos humanos y por eso habré de responder y exigir se respete la autonomía del Ayuntamiento y mis derechos personales”.

Luego, el Alcalde habló de la acción de un Congreso del Estado sometido al capricho y los arrebatos de algún otro gobierno y que además se presta a la ejecución de venganzas políticas, actuando en contra de su naturaleza y obligación, que es salvaguardar el Estado de Derecho y no de verdugos por encargo y además muy mal pagado”.

Recapituló que los diputados le acusan de haber utilizado una computadora y una impresora, propiedad del Municipio para difundir campañas para prevenir el cáncer de la mujer, para poder informarle a todos los ciudadanos a través de los medios que hay más infraestructura, aulas, bardas perimetrales, comedores estudiantiles y bibliotecas.

El galeno refrendó su pasión por lo que seguirá haciendo, que es la medicina, así como el servicio público. Dijo que si es delito prevenir el dolor ajeno, curar enfermedades y salvaguardar la integridad física y patrimonial de mis gobernados, “mucho lo lamento por quien no piense así y que sea el pueblo el que me juzgue y no mis adversarios políticos”.


También, el doctor Enríquez subrayó que “eso sí duele”, al anotar que sus detractores no tuvieron recato y reflexionó que incluso en el tiempo cuando hubo represión hubo ataques, pero se respetaba siempre a la mujer que acompañaba al político y que hacía un esfuerzo por servirle a los habitantes de cada pueblo. En esta parte el alcalde se refirió a las quejas y denuncias en el INE en contra de la doctora Ana Beatriz González Carranza. Puso en claro que ella no trabaja en el municipio, que es honoraria como presidenta del DIF Municipal, que no recibe un solo centavo del erario municipal.

Luego se refirió a quienes llamó sus adversarios políticos. Les dijo que no teman, que por el momento no ha tomado ninguna decisión más allá de seguir sirviendo a los duranguenses. Les dijo que llegado el caso, si decide participar en un proceso electoral, para el siguiente año, lo venzan en las urnas y no manipulando el poder de las instituciones como lo pretenden hacer.


Dijo que hoy los diputados han transgredido la Constitución General de la República, “y no sólo avasallaron mis derechos políticos y humanos, también avasallaron a todo un Ayuntamiento protegido por la Constitución General de la República”.

Agregó que los legisladores, bajo la sinrazón, desean aplicarle una pena equivalente a la pena de muerte, propia para los más crueles criminales: “Es la pena de muerte política, para no participar en las futuras elecciones”.

Dijo que sabe que cuenta con el apoyo de todos, de sus amigos, de su familia, del gran equipo del gobierno municipal.

Anticipó que se defenderá y que exigirá que se respeten sus derechos, pero sobre todo los derechos de los ciudadanos: “Si quieren mi rendición, que sea por resolución de un órgano jurisdiccional, que se conduzca bajo el precepto de la ley, pero no en esta ley, porque no tienen razón”.