Solicita el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), y empresas del ramo textil, la intervención del gobernador de Durango, Estaban Villegas, para que en el proyecto de confección de uniformes escolares se paguen los precios justos en el proceso de elaboración, y que se sume a empresas de Durango en el proceso de bordado, lo que aumentaría la cantidad de ingreso económico para la entidad, las empresas, y los trabajadores del estado.
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Igualmente solicitaron que se revise el tabulador de precios que la empresa ganadora oferta los talleres sociales y empresas, entendiendo que estos deben ser justos.
“El proyecto de confección de uniformes escolares, representa para los empresarios del estado una oportunidad de reactivar la actividad económica de las empresas del ramo textil, en el año 2019 fue la última vez que se llevó acabo este programa, y durante este proceso más de 80 talleres trabajaron como parte de la confección de las prendas, lo que representó que familias de distintos puntos del regado contaran con este ingreso” dijo al respecto, Eduardo Rodríguez Gálvez, presidente de la Canacintra.
Añadió que para la confección de los uniformes en este 2023, se llevaron a cabo distintos talleres a los que no fueron invitados como organismos textiles, en febrero se lanzó la licitación, y ya se conocen los precios y actividades en las que las empresas de Durango pueden formar parte, y es lamentable que para los empresarios del sector textil su participación sea únicamente por la costura, y el precio a pagar por cada kit es de 80 pesos con 54 centavos, que es un precio es un 3.4 por ciento menor al que se pagó en 2013, cuando el salario mínimo ha crecido un 238 por ciento, pasando de 61.38 pesos en 2013, a 207.44 pesos este año.
Por su parte, Iris Aragón Santillana, presidenta de DUTEXA, mencionó que para las empresas del ramo textil no es atractivo trabajar para la empresa foránea que ganó la licitación, el proyecto originalmente fue creado para fomentar la economía local, para provocar una economía circulante, que el dinero que se empleaba en la confección de los uniformes escolares, fuera el mismo que finalmente circular en Durango, y el objetivo se ha desvirtuado.
“Se pueden retomar las mesas de trabajo, para que se reconsideren las condiciones en que fue contratada la compra de los uniformes, en Durango existen empresas con la capacidad para poder cumplir con diversos procesos, entre ellos el de bordado, que es parte primordial del uniforme” resaltó.