Entre la población privadas de su libertad y la policía penitenciaria, suman en Durango más de 4 mil personas, en un sistema en el que la aplicación de medidas oportunas, que incluyeron la suspensión de visitas desde marzo pasado, han impedido brotes de Covid-19 y solamente se han registrado en total 5 casos positivos, lamentablemente con un deceso.
Lo anterior, según información proporcionada a este diario por la Subsecretaria del Sistema Penitenciario del Estado de Durango, Liliana Alvarado Salinas, quien destacó que cuando en centros de reinserción de otras partes del país se han presentado cifras importantes en cuanto a positivos, aquí la cifra se mantiene baja y solamente con una muerte.
Al respecto, Alvarado Salinas hace resaltar que la determinación del Secretario Javier Castrellón, de suspender la visita a todos los centros desde el 17 de marzo, fue fundamental para que el saldo de la pandemia a la fecha no sea motivo de alarma, aunque sí de mantener estrictas medidas preventivas.
Recordó el primer contagio, un masculino de 52 años de edad que falleció; una persona que tenía tres semanas de ingreso al Centro y que provocó la activación de protocolos, donde se colocó un cerco sanitario, con seguimiento de 24 horas diarias a toda la población y principalmente a la de nuevo ingreso.
De hecho, todos los ingresos nuevos se mantienen en confinamiento durante 40 días en un área específica a fin de impedir brotes al interior de los centros.
Semanas después del primer contagio, se detectó un caso positivo más; el paciente fue trasladado al hospital 450, donde permaneció durante diez días, fue dado de alta y está ya de nuevo en el centro, en un área de cuidados especiales.
Por fortunal, señala la entrevistada, se estableció el cerco sanitario puntualmente y ello ha permitido mantener un control con toda la población.
Y es que desde el 17 de marzo del presente año, se suspendió la visita en todos los centros del Estado y en el tayecto se ha tenido un control muy estricto y minucioso; “eso ha permitido mantener libre de Covid a las personas privadas de su libertad”.
Menciona que Durango fue de los últimos estados que vio reflejados casos positivos en los centros de reinserción, ya que a nivel nacional hay muchas muertes en el sistema penitenciario, tanto en la población como en policías.
Por lo que corresponde a los policías penitenciarios, entre éste personal se presentaron tres casos positivos, a los que se les dio seguimiento y ya están recuperados.
Actualmente en el estado hay 3580 personas privadas de su libertad, incluyendo adolescentes y mujeres. Luego, en cuanto a personal policial, suman alrededor de 500, para hacer una población total superior a las 4 mil almas; “fuimos el primer estado en suspender visitas y hasta la fecha la medida prevalece. La reapertura está programada para el mes que entra, para lo cual la idea es garantizar todas las medidas preventivas tanto para la población como para las visitas y desde luego el personal policial”.
Finalmente, Liliana Angélica destaca que la población penitenciaria ha colaborado mucho en todo este contexto, “porque si no tuviéramos la voluntad de ellos hubieran surgido muchos problemas y hasta ahora, no se han manifestado inconformidades y al contrario, han hecho su parte para cuidar la salud y la vida”.