La estrategia de prevención da buenos resultados y es preciso desdoblarla a nivel estatal, informó Adrian Alanís Quiñones, Secretario General de Gobierno, al encabezar el Inicio de la Campaña Estatal para la Prevención del Suicidio, quien afirmó que está problemática ha tenido un crecimiento constante en los últimos años, pasando de 89 casos en 2002 a 153 en 2019 y que en los municipios de Durango, Gómez Palacio, Lerdo y Santiago Papasquiaro se engloban casi el 80 por ciento de los suicidios.
Resaltó que ser cercanos a la gente que necesita apoyo salva vidas y está atención es urgente. “A los Duranguenses nos urge sentirnos seguros, atendidos y valorados, requerimos enfrentar la realidad con determinación y esperanza renovada de un futuro promisorio, el suicidio no debe ni tiene que ser un asunto que se guarde debajo de la mesa, ni motivo de vergüenza para las familias o escarnio de la sociedad, vamos a atenderlo como lo que es, un problema grave de salud pública” precisó, teniendo de marco el Centro de Convenciones Bicentenario.
Acompañado del Secretario de Salud, Sergio González Romero, Soledad Ruiz Canaán, Directora General del Instituto de Salud Mental, Rocío Azucena Manzano Chaidez, Directora de DIF Estatal, Marco Antonio Güereca Díaz, titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, líderes religiosos, así como funcionarios de los órdenes de gobierno, el Secretario de Gobierno resaltó que al ser el suicidio un problema multifactorial, requiere también de la atención multidisciplinaria e interinstitucional con un enfoque innovador e integral.
Por su parte, Soledad Ruiz Canaán, Directora General del Instituto de Salud Mental, detalló que más de 800 mil personas atentan contra su vida cada año a nivel mundial, y resaltó que se enfrenta en el mundo actual es muy fácil entrar en un fenómeno de descomposición social, en el que se tienen también problemas de pobreza, falta de empleo, y problemas en general al no cubrir los factores elementos para la dignidad del ser humano.
“Tenemos un rezago histórico en este país de la no atención a la salud mental, que nos ha traído como consecuencia el aumento de enfermedades mentales, por lo tanto la atención a la salud mental deberá encaminarse a reestructurar, redefinir las funciones y reclasificar las diferentes estructuras y unidades de salud en los tres niveles de atención, la plantilla de recursos humanos y el financiamiento, como la ampliación de la cobertura” resaltó Ruiz Canaán.