De acuerdo con el registro de la Secretaría de Turismo, Durango cuenta con 128 centros ecoturísticos ubicados en la zona serrana del estado, sin embargo estos crecieron muy probablemente sin un control y supervisión, por lo que ahora la misión que tiene la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente (SRNyMA), es poner límites a estos desarrollos para evitar que se convierta en un problema de deforestación y daño permanente a los bosques de la entidad.
La titular de la SRNyMA, Claudia Hernández Espino, informó que la mayoría de estos lugares de hospedaje, se concentran en la sierra de los municipios de Durango y Pueblo Nuevo, de ahí que incluso es necesario trabajar con los Gobiernos municipales encargados de dar los permisos de lotificación, a fin de analizar el impacto ambiental y las repercusiones que se generan a partir de estas construcciones.
Con esto se podrá conocer cuáles serán las medidas y los límites que se deben poner para evitar que estos destruyan áreas boscosas del estado.
Explicó que en casos como el del Parque Ecológico de Mexiquillo, el cual es recorrido por cientos de visitantes propios y extranjeros, existe una sobre explotación del lugar, por lo que es necesario tener un cuidado especial sobre todo en el caso de los residuos sólidos.
“Hemos estado capacitando a los Centros Ecoturísticos en qué hacer con sus residuos y cómo manejarlos para evitar incendios forestales, incluso las capacidades de carga del lugar, no meterle mucha gente o mucha actividad con la finalidad de conservarlo”, dijo Hernández Espino.
Actualización de programa de ordenamiento ecológico
Tan solo la pasada temporada vacacional de diciembre, estos Centros Ecoturísticos captaron entre el 80 y el cien por ciento de su ocupación, informó el desarrollador turístico, Rafael Sarmiento, quien señaló que este tipo de lugares son muy atractivos sobre todo para visitantes de los estados vecinos como Sinaloa, Coahuila y Nayarit donde originalmente hay un clima mucho más cálido.
Informó que existen varios proyectos de construcción de carácter privado, incluso en algunos se aumenta su capacidad ya instalada a una o más cabañas adicionales a las que ya cuenta, anualmente, aunque sin duda la inversión mayor es privada.
De ahí que ya se trabaja en la actualización del Programa de Ordenamiento Ecológico, que a decir de la propia secretaria de Medio Ambiente en el estado, es un documento que no se ha modificado desde hace 10 años, “se actualiza en función de la actividad económica del estado”, explicó, por lo que en éste no se contempla todavía la actividad turística, cosa que hoy en día es necesaria.
Por lo que esperan que en el primer trimestre de este 2024 ya se tenga lista la actualización de este reglamento, un instrumento de planeación del territorio que permite el crecimiento del estado en función de la vocación natural del suelo y evitar que esto se salga de control, “esto es importante por las inversiones que vienen”, dijo.