Violencia familiar no para, en 2020 aumentaron 10 % las denuncias en Durango

La falta de denuncias de delitos como violencia sexual, física, verbal o emocional, contra menores de edad, genera un subregistro que impide ver las cifras reales advierte SIPINNA

David Enríquez | El Sol de Durango

  · viernes 19 de marzo de 2021

Foto: Cortesía | Gobierno del Estado

Los índices de violencia sexual, física, verbal, emocional contra niños, niñas y adolescentes se han Incrementado en Durango hasta un 10% particularmente durante el confinamiento por la pandemia, aseguró en entrevista, Armando del Castillo Herrera, al advertir que no todos los casos son conocidos debido a la falta de denuncias, lo que genera un subregistro.

Entrevistado en sus oficinas, el Secretario Ejecutivo del Sistema de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (SIPINNA), fue cuestionado en torno a la situación que atraviesan en Durango los menores, luego de darse a conocer dos recientes agresiones a manos de parejas sentimentales de las madres.

Como parte de la labor de esta instancia reconoció la necesidad de bajar los índices de violencia que se tienen en el estado, de ahí que trabajan a través de una comisión con los diputados locales, en la prohibición del castigo corporal, en este sentido aclaró que debió corregirse el Artículo 418 del Código Civil, donde se habla del "Derecho a la corrección" y ello era una carta abierta que muchas veces derivaba en maltratos.

Detalló que el aumento en la violencia contra este sector poblacional quienes se encuentran indefensos ante el actuar de un adulto, solo en el último año es del 10%. Por ejemplo, en la capital del estado el delito que más se presenta es la omisión de cuidados, mientras que en Región Lagunera y otros municipios del estado los abusos son de tipo sexual o físico, en todos los casos infringido por parientes cercanos como tíos, primos, abuelos, padres o padrastros.

Reconoció que hay casos donde en los primeros indicios de violencia no se denuncian ante las autoridades y la situación crece hasta llegar a extremos como los dos recientes, donde bebés están al borde de la muerte debido a ataques por las parejas sentimentales de sus madres, quienes lamentablemente se convirtieron en cómplices.

Del Castillo Herrera concluyó que debe trabajarse en fortalecer el núcleo familiar ya que ahí es donde se genera la violencia, que de no detenerse es replicada en las calles y en las nuevas generaciones.