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Morena tiene varias cartas rumbo a la elección presidencial de 2024, incluido su coordinador en el Senado de la República, Ricardo Monreal Ávila, aseguró su dirigente nacional Mario Delgado.
Además de los ya conocidos aspirantes Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard, el líder morenista mencionó otros nombres que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha puesto sobre la mesa para sucederlo en tres años, como la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, o la titular de Energía, Rocío Nahle.
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Pero a diferencia de López Obrador, que en dos ocasiones ha omitido mencionar al senador zacatecano como posible candidato de Morena a sucederlo en Palacio Nacional, Mario Delgado sí lo tiene en consideración.
“Hay más nombres, tenemos muy buenos liderazgos que pueden encabezar el proceso de transformación. Está el líder de los senadores, Ricardo Monreal, la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, la secretaria de Energía. Nosotros tenemos muchas cartas con qué jugar, quienes están en la soledad absoluta son la oposición”, señaló el líder del partido guinda a El Sol de México.
Delgado Carrillo aseguró que para Morena el camino rumbo a 2024 se está construyendo desde este momento ya que entre sus planes está ganar la ratificación de mandato de López Obrador así como las seis gubernaturas en juego el próximo año. La meta es que Movimiento Regeneración Nacional triunfe en todas y así logre gobernar un acumulado de 24 entidades.
De cara a la cima presidencial, el líder de Morena señaló que en dicho proceso será la gente quien tenga la última palabra, pues de acuerdo con sus estatutos, los candidatos se eligen a través de encuestas, “entonces vamos a dejar esa decisión y la gente decidirá quién debe de continuar este proyecto de transformación”.
—En este proceso ¿hay un Morena dividido?
En Morena siempre habrá distintas opiniones, somos un movimiento plural y lo que tenemos que lograr es que haya respeto en las distintas opiniones.
—¿Por qué una alianza popular? ¿Es una estrategia para el 24?
Es una convocatoria a organizarnos como partido para aumentar nuestra capacidad de movilización, para ganar en la revocación de mandato y refrendar a nuestro gobierno en marzo del año próximo.
La convocatoria es para ir a buscar a todos los simpatizantes de este movimiento, organizarlos para que este proyecto continúe y los que quieran afiliarse a Morena, bienvenidos. Si están de acuerdo en respetar los principios de nuestro movimiento y si no, que sean simpatizantes.
Esa invitación a participar de manera activa en el movimiento es parte de nuestra tarea que tenemos como partido.
—¿Han disminuido sus afiliados? ¿Cuántos tienen actualmente?
Venimos de un conflicto muy largo interno que llevó a que la autoridad electoral haya desconocido o anulado el padrón. Sólo existe el que está registrado ante el Instituto Nacional Electoral (INE), alrededor de 400 mil o 300 mil afiliados. Debemos renovar el padrón, invitar a afiliarse, ratificar la afiliación de los que ya están y organizarlos en comités.
—Hablemos de los nuevos gobernadores, ¿cómo será su diálogo con la Federación?
Hay un cambio de realidad política en el país. Nuestro movimiento tendrá más de la mitad de las entidades federativas. ¡Hay un cambio en los equilibrios!
Con la Conago, tendrá una visión diferente, más de cooperación con el Gobierno federal, para ver cómo se enfrentan los problemas de manera conjunta. Tener una relación constructiva en lugar de ser un espacio para la confrontación política. Como en los últimos años que algunos gobernadores decidieron salirse.
En esta nueva realidad, ni siquiera hay que conformar una nueva organización. Ya la Conago, al ser mayoritariamente de gobierno Morena, habrá una relación diferente con la Federación y con el presidente de la República.
—En su momento insististe en la desaparición de la Conago ¿por qué el cambio de opinión?
Se planteó como una posibilidad, hacer una organización nueva donde estuvieran los gobiernos de Morena, pero digamos que el tener la mayoría de entidades federativas de la Conago te permite darle otra orientación.
—Entonces, ¿el diálogo con los gobernadores de oposición cómo se dará?
La Secretaría de Gobernación será la encargada. Es parte de su tarea, lo mismo que del Gobierno federal. El presidente ha marcado una ruta de institucionalidad.
—¿Ustedes estarían abiertos al diálogo?
A mí no me corresponde esa tarea, pero desde Morena siempre buscamos construir.
—En la parte legislativa ¿cuáles son las prioridades para Morena?
En la Cámara hay tres iniciativas que van a caer en este periodo. Una es la reforma eléctrica. Hay que volver a ganar terreno en materia de energía, fortaleciendo a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Otra es la de la Guardia Nacional, hay que fortalecerla, que haya un fortalecimiento institucional.
La última, la reforma electoral, que es muy necesaria. La autoridad electoral se quedó atrás, viene del antiguo régimen, tiene complicidades e intereses con algunos partidos políticos y eso no nos deja avanzar en materia de democratización. Que haya neutralidad, que haya imparcialidad.
—En lo electoral, ¿no sería una reforma a modo para beneficiar a Morena?
No, nosotros venimos de la lucha democrática. No necesitamos un árbitro a modo, nosotros somos demócratas y queremos que se respete la voluntad de la gente. Parte del proyecto de Morena es vivir en una auténtica democracia, que haya elecciones libres, transparentes y que el pueblo tome las decisiones.
