GÓMEZ PALACIO, Dgo. (OEM).-Familiares y hermanos le dan el último adiós a la niña Carol en la funeraria donde fue velada y posteriormente fueron trasladados sus restos en la carroza fúnebre, sin embargo, los hechos aún causan una gran consternación en la sociedad por la brutalidad en que le arrebataron la vida a la pequeña quien también fue ultrajada sexualmente.
La velación del infante fue en una funeraria ubicada en la calzada J. Agustín Castro, de esta ciudad lagunera, lugar a donde acudieron familiares y algunos amigos para dar el último adiós.
Gran consternación ha causado este brutal homicidio donde familiares y sociedad en general no alcanzan a comprender del porque le arrancaron la vida a una inocente que además fue violentada sexualmente.
Dolor y tristeza se percibía en la región al conocer tan lamentable hecho y no se alcanza a entender porque hay tanta maldad y coraje de la pareja para con una niña indefensa que nada tenía que ver por los problemas que pudiera haber tenido su madre con su actual pareja a quien se le acusa de ser el presunto responsable de golpearla y ultrajarla hasta causar su muerte.
Afuera de la funeraria permanecía una patrulla con varios elementos de seguridad pública quienes resguardaban el lugar y una vez que salió la carroza para trasladar los restos de la menor, también fue escoltada por una patrulla de la policía.
Sin duda que los sentimientos de muchos al conocer de este hecho violento fue de tristeza y coraje hacia los responsables que la maltrataban, golpeaban y no le brindaron el cuidado y atención que deben tener los menores.
Es por ello que el clamor social hacia las autoridades es que le apliquen todo el peso de la ley y que se haga justicia contra quién fue su padrastro identificado como Salvador “N”, así como a la propia madre Estela “N” domiciliados en fraccionamiento Quintas de Lerdo para que se les aplique la pena máxima.
Cabe mencionar que la Fiscal General de Durango Ruth Medina informó que se sigue investigando e integrando la carpeta de investigación por los delitos de feminicidio y violación, a fin de poder exigir que se les pueda aplicar la pena máxima que sería de 85 años para Salvador y 63 para Estela.
