Fueron resguardados un niño y una niña de 7 y 6 años de edad, respectivamente, cuando se encontraban intoxicados por el consumo de alguna droga, a la vez que la menor mostraba signos de violencia física.
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Fue la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) quien informó lo anterior y además agregó que los elementos de la Policía Estatal (PE) lograron aprehender a los padres, identificados como Guadalupe y Pablo de 27 y 32 años de edad, respectivamente.
En el informe policial se establece que la mujer es la madre de los niños y el hombre es el padrastro, además les encontraron una bolsa con marihuana al momento de la detención.
Fue cuando los agentes realizaban recorridos de vigilancia por el fraccionamiento Río Dorado, al pasar frente al área de juegos se percataron de la presencia de dos niños menores, los cuales mostraban una actitud anormal, estaban desorientados y asustados.
Al acercarse con ellos observaron que la niña presentaba golpes en el rostro, así como manchas de sangre en la nariz y frente, por lo que comenzaron a revisarlos y les preguntaron dónde estaban sus padres.
Con palabras erráticas y señales los niños indicaron el domicilio, siendo en Lote 45 Manzana 11, número 204 edificio “F” del fraccionamiento Río Dorado, a donde llegaron los elementos estatales y tocaron a la puerta.
De ahí salió la mujer, a la que le preguntaron si era la madre de los niños, pero de inmediato intervino Pablo, quien dijo que sí eran los padres y qué se les ofrecía.
Ambos individuos mostraban signos de intoxicación, señalándoles el estado en que fueron encontrados los menores, a la vez que se procedió a revisarlos y les aseguraron una bolsa con marihuana, procediendo a su detención.
Se solicitó la presencia de personal especializado del Programa Esmeralda perteneciente a la SSP para atender a los menores y proceder a su canalización, por su posible intoxicación y por los golpes que presentaba la niña, ya que al parecer esta cayó por unas escaleras en el estado de inconciencia en el que se encontraba junto con su menor hermano.
Tanto la madre como el padrastro fueron puestos a disposición de la Fiscalía General del Estado (FGE) por la responsabilidad que les resulte de los hechos antes mencionados, ya que se habla de omisión de cuidados y muy probablemente violencia familiar.