PARRAL. En los dos últimos meses las autoridades de Salud de Chihuahua han certificado más de cien niños con diferentes grados de desnutrición, tres de los cuales fallecieron en los municipios de Guadalupe y Calvo y Parral.
En el hospital de Guadalupe y Calvo se siguen presentando nuevos casos, y hasta el viernes pasado permanecían tres infantes internados con este cuadro.
Las malas cosechas que se presentaron este año contribuyeron a que se generara una crisis alimentaria en la zona. Los menores afectados se encuentran en el rango de cero a cinco años de edad, originarios de las comunidades más alejadas de la cabecera municipal, entre las que se encuentran Cumbres del durazno, Palmillas, Los Flacos, La Lajita, El Palomar, El Salto y El Carrizal, donde la mayoría de la población es de origen tarahumara.
De los infantes diagnosticados y atendidos en aquella localidad, han fallecido tres, dos en el mismo hospital de Guadalupe y Calvo y el tercero al municipio de Parral a donde fue trasladado dada la gravedad de su padecimiento.
Sin embargo, reportes de personal adscrito a la jurisdicción sanitaria en aquel lugar, señalan que por lo menos otros cinco menores habrían fallecido por estas mismas causas, esto en las comunidades de Los Flacos y El Durazno.
En esta última comunidad, en mayo se documentó que más de treinta personas han perdido la vida a lo largo de cuatro años por una extraña enfermedad provocada por un hongo que provoca llagas en la piel que se infectan con facilidad y terminan por provocar la muerte por un cuadro septicemia.